Hoy día, en muchos países, se sabe de la existencia, paisajes y gente de la República Dominicana. Hoy día, el país es destino de grandes producciones de cine internacionales que vienen a rodarse en nuestros estudios. Hoy día, el cine se puede considerar como un fortalecedor del turismo, industria fundamental de esta nación.
Al principio, cuando se daban los primeros pasos del cine en los tiempos iniciales de aplicación de la Ley Nacional de Cine, la 108-10, con El Rey de Najayo, dirigida y producida por un inolvidable Fernando Báez, nuestra industria era reflejo de su etapa en la que se iniciaba una etapa inicial y sin precedente.
La Ley para el Fomento de la Actividad Cinematográfica en RD, fue promulgada el 12 de agosto de 2010 por el presidente Leonel Fernández, luego de haber sido aprobada por el Senado el 29 de junio, y luego sancionada por la Cámara de Diputados el 22 de julio. Se debe reconoce el ingente rol cumplido por la Dirección Genera de Cine, en la persona de sus dos titulares: Don Ellis Perez e Yvette Marichal.
A partir de 2012, es cuando arranca en realidad la producción audiovisual, en principio solo algunos proyectos y con materias pendientes en su perfeccionamiento, con muchos caminos internacionales por recorrer. Era el “cine dominicano” que podíamos hacer en ese momento.
Ahora, al cabo de casi siete años, el cine se ha tornado mucho mas profesional en sus aspectos de guion, recursos, actuación e incidencia internacional, expresada en premios importantes Solo en 2017, se lograron 27 premios, incluyendo el Leopardo de Oro, del Festival Internacional de Cine de Locarno, obtenido por Cocote, de Nelson Carlos de los Santos, abrimos el camino hacia del prestigioso Festival Internacional de Sundance, la “creme de la creme” del cine independiente norteamericano y de otros países, con Carpinteros, dirigida por Jose María Cabral, para solo citar dos ejemplos.
Hoy día ya no se puede hablar del “Cine Dominicano” porque no hay uno. Hay “cines dominicanos” variados en sus géneros, expresiones, calidades, talentos humanos y concepciones, avanzando hacia la conquista del mercado internacional, con películas cada vez más asimilables para cualquier cultura.