El arte y la cultura han demostrado, en la entrega 39 Feria Internacional de Turismo (FITUR 2019), que son altamente efectivos gestores de la marca turística dominicana.
La trascendencia de la presencia nacional tuvo en FITUR un aspecto fundamental: el rol del arte y la cultura local como atractivo, como puntos de luz que hacen fijar la atención internacional de un aspecto de nuestro destino que debe seguir.
Como es costumbre, en el pabellón dominicano, se expusieron muchas de las caras cotidianas de nuestra cultura: bailes folclóricos, la confección de tabacos, el frio frio, la muestra-venta de joyas artesanales y otras. Pero ahora se llegó más lejos, procurando que el arte y la cultura incidieran de nueva forma y por medio de altos valores, sobre todo en el arte culinario y plástico de la República Dominicana.
Fue muy inteligente por parte del Banco de Reservas la ofensiva cultural dominicana ya que expuso elevados exponentes del talento artístico y cultural criollo en función de atraer la atención sobre el país turístico que somos.
Independientemente de las operaciones y negociaciones, de las inversiones que fueron cerradas, de los premios otorgados a diversos aspectos y expositores de la delegación dominicana, tanto para el Ministerio de Turismo como de expositores privados (que fueron cuatro reconocimientos), aparte del despliegue y visibilización de la marca turística nacional al ser socios del evento (categoría a la que se accede mediante una inversión acorde con lo que significa comercialmente estar en primer lugar de una vitrina internacional que son este tipo de ferias comerciales) La participación de la cocina dominicana en la obra gastronómica basada en nuestros productos agrícolas- por la vía de la cheff dominicana de mayor prestigio internacional, María Marte (dos Estrellas Michelín) y la exposición El Universo subreal de Iván Tovar, no casualmente el pintor dominicano de más elevada cotización y elevado prestigio en Europa y otros continentes, no fueron ninguna casualidad.
Ambas personalidades dieron a dominicana, un toque sin igual en Fitur que pocos países igualaron. Una noble experiencia.