El fallecimiento, el pasado lunes 26 de septiembre, de Ramoncito Frías, productor y presentador de televisión, mueve a reflexionar sobre el ejemplo de vida que ofreció, muestrario que es virtualmente desconocido por la presente generación dominicana.
Ramoncito Frías fue mucho más que lo que se refiere en las notas luctuosas que se han publicado con motivo de su sorpresiva partida.
Miembro del Colegio Dominicano de Periodistas, de la Asociación Dominicana de Cronistas de Arte y de la Asociación Dominicana de Prensa Turística, Diaz fue un compañero solidario, siempre presente y operando como factor de armonización, alegría y unidad. Adompretur ha expresado sus condolencias por su fallecimiento.
Ramoncito Frías, en base a su talento, su visión técnica y artística, se transformó, a partir del valor de su labor y el criterio con que la desarrolló, en una marca en el medio televisivo. Su nombre agregaba valor a los proyectos televisivos a los cuales servía.
Quienes le vieron en los últimos diez años de su vida como productor de su programa independiente, llegando a los eventos, convocado a cubrir con su cámara y su infaltable esposa Yoany Arias de Frías, infaltable compañera con la que llegaba invariablemente a todos sus servicios.
La que ha partido es la de una vida dedicada al trabajo en la televisión dominicana, en la que se inició en los años 60s cuando entro a Radio Televisión Dominicana como aprendiz de sonidista, labor que aprendió, ascendió a sonidista titular y de ahí el paso, primero a camarógrafo y luego a director de cámara, fue un proceso rápido y sorprendente.
Su formación televisiva la debe a su trabajo en Puerto Rico, cuando siendo muy joven viajó a la vecina isla y logró insertarse en el mundo audiovisual boricua. Con esa experiencia, regresó al país para servir a la televisión criolla.
Pero si bien se lució como eje directriz de cámaras en RTVD, incluso siendo el hombre básico de la parte técnica del espacio El Show del Mediodía entre 1978 y 1991 y en que hizo la inusual transferencia de roles profesionales, el crossover, que le llevó de director de cámaras a presentador de televisión, codeándose con figuras del talento de Yaqui Núñez del Risco, Daniel Díaz Alejo, Zoila Luna, Julie Carlo, comenzando como reportero desde la calle hasta llegar a ser presentador de estudio.
Ramoncito Frías sorprendió a mucha gente haciendo de conductor de los programas, en las décadas de 1970 y 1980, «Wilfrido en vivo» y «Tiempo joven».
Fue talento presentador desde 1985 de «Sábado grande», a través de Color Visión, junto a Mac Cordero, Nuryn Sanlley, María del Carmen Hernández, Roberto Salcedo y Julio César Matías.
En los últimos años, reporta el Listín Diario, Ramoncito se dedicó a programas independientes, entre ellos «Ramoncito al día», que se transmitía por el Canal SI TV, Canal 3 de Wind Telecom y por Canal 38 de Tricom, los Domingos, de 11:00 P.M. a 12:00 A.M. y en el Canal 4 produjo «Las noches con Ramón» y se le conoció por la frase de su programa «Okey Ramón».
Dotado de una hermosa y pausada voz. Ramoncito Frías se descubrió así mismo como un talento de muchos valores para la televisión.
Tenía dotes naturales de maestro e insistía en que la base de la dirección de cámaras para un programa de televisión profesional, tiene como requisito inicial y fundamental, la iluminación.
Ramoncito era inflexible en su crítica cuando veía un programa mal iluminado, lo que representaba, a su modo de ver, el fracaso de ese espacio.
Censuraba las sombras en los rostros de entrevistados o presentadores y animadores y las debilidades de iluminación en determinados ángulos del set.
Por las variaciones laborales, los cambios de programación y espacios líderes, le llevaron a tomar la decisión de tomar el camino de la independencia laboral, de trabajar como su propio jefe.
Este es el adiós para un hombre portador de una estatura inmensa por la labor técnica y de comunicación en nuestra televisión. Uno que aprendió a recorrer sus caminos y poner ese sello personal en toda su obra como productor y comunicador frente a cámaras.
Adiós y hasta siempre, Ramoncito Frías.
